Adelante...

... por los sueños que aún nos quedan
... por aquéllos que están por venir





* Porque Salamanca está sólo a un paso y a un click de ratón; porque parece que este año empiezo con buen pie; porque el CAP, el alemán, las interpretaciones, las traducciones y las páginas web no van a poder conmigo; porque sí, porque sí, porque sí... :)

¡Sí...!

¡¡¡¡A-PRO-BÉ!!!!


Graciaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaas

Puedo...

Je peux... je suis sûre, je peux réussir... ou pas?
On verra...

Demain matin, la reponse...

Nervios...

Nervios, nervios, nervios, nervios, nervios, nervios, nervios, nervios, nervios, nervios, nervios, nervios, nervios, nervios, nervios, nervios, nervios, nervios, nervios, nervios, nervios, nervios, nervios, nervios, nervios, nervios, nervios, nervios, nervios, nervios, nervios, nervios, nervios, nervios, nervios, nervios, nervios, nervios, nervios, nervios, nervios, nervios, nervios, nervios, nervios, nervios, nervios, nervios, nervios, nervios, nervios, nervios, nervios, nervios, nervios, nervios, nervios, nervios, nervios, nervios, nervios, nervios, nervios, nervios, nervios, nervios...


Ya han salido las notas de italiano... y no sé si ir a verlas ahora o esperar a llevarme el piñazo otro rato...








(Gracias a los que estáis ahí... :-)

La suerte no existe...

Éste ha sido mi nick en el messenger desde mayo. Creo que nunca había mantenido durante tanto tiempo la misma frase, si descontamos los encabezamientos que siempre he tenido (desde el Dulcinea con el que di los primeros pasos virtuales hasta la carita gafapasta que se parece a mí.)

A lo que iba. Si lo puse, es porque de verdad lo pensaba. Durante mucho, mucho tiempo, pensé que tenía mucha suerte, que las cosas me salían muy bien y que no tenía motivos de queja en el plano académico. Pero llegó la Escuela de Idiomas y me dio los primeros golpes en forma de suspensos en francés e italiano, continuó el Proficiency y volvió el italiano (esta vez, en filología).

-De acuerdo -pensé-. No voy a tirar la toalla. Puedo con eso y con más.
Y volví a intentarlo. Y me esforcé. Y estudié. Y lo preparé. Y creí que esta vez sí.
Con idéntico resultado.

Tres NA en los tablones de la EOI y una D impresa en un papel de Cambridge me han devuelto a la realidad. La suerte no existe.

Y la echo de menos

Y ya...

Pues sí... tanto desear que llegaran estos días y ahora ya no quiero irme...

Qué mes tan movidito...cuántas cosas y qué rápido han pasado... Al final, teníais razón: todo merece la pena :)




Y ahora, a volver a León... qué complicaciones, madre mía...


(debería hacer más caso a esta rinconcillo de la web... jejejeje)